lunes, 29 de agosto de 2016

De haberlo sabido

Te acercas en silencio y, sin haberte sentido, me partes en dos con un roce, en un instante, sin solución.

Quisiera meterte dentro pero eres tan grande que no me cabes. De haberlo sabido, puede que ni lo hubiera intentado. 

Hueles a sal de playa aun sin haberla pisado, hueles a mí, sabes al mar que ya no veo. 
Tienes en los ojos el derribo y la esperanza de cambio. 

De haberlo presentido te hubiera buscado antes. Sin saber que existías, que estarías para mí en la medida justa en que ambos nos construimos, nos hacemos más amigos, nos queremos más.

Sin haberlo sabido, no te habría podido querer mejor.

De haberlo querido, nada cambiaría.